TALBOT LAGO

    Un automóvil histórico, aunque poco conocido a pesar de todo, que marcó un estilo que muchos otros imitaron con una precisión que podría calificarse como patológica. También es conocido por ser uno de los automóviles que más variaciones ha experimentado a lo largo de los años, tantas, que no y mismo las conozco todas. Sin embargo, me centraré en el Talbot Lago T-150.
    Bien, las características técnicas de este modelo en concreto, son ciertamente extrañas: su velocidad máxima es de 177,2km/h (sorprendente tratándose de un automóvil construido en los 50), tiene un motor V8 de 4.0 litros (a pesar de que la primera versión poseía la asombrosa cifra de 22,5 litros, y no, no es broma, aun teniendo en cuenta que los cochees actuales tienen 10 veces menos volumen de combustible) con doble carburador, y llegaba a desarrollar 140 caballos de potencia.
   Seguramente, para los actuales amantes del automóvil, estas cifras no sean impresionantes comparándolas con las de otros automóviles contemporáneos, pero teniendo en cuenta la antigüedad del artefacto del que hablamos, a mí si que me parecen insólitas.
   Sin embargo, lo revolucionario de este coche, no es el motor, sino la carrocería, que evoca a diferentes elementos, tales como una gota de agua, la cola de un cometa, o las curvas de una mujer de físico ideal. De cualquier manera, nos encontramos ante un impresionante automóvil que se ha llegado a vender por la impresionante cifra de 3 millones de euros.
   Y, finalmente, os dejo unas cuantas imágenes de las versiones alternas del Lago: