Presentado en el Salón del Automóvil de Nueva York, este revival del bestial icono que ha impresionado a aficionados y amantes de la automoción, posee un motor V10, tal y como se presentaban las dos versiones anteriores, salvo porque esta vez la cilindrada del motor es de nada menos que 8.4 litros, desarrollando 812Nm de par de torsión (¡wow!) y nada menos que 640cv. También cabe destacar, que como en los anteriores modelos, esta obra de ingeniería vendrá equipada de serie con tracción trasera.
Además, nuestro nuevo amigo viperino se fabricará a mano en las instalaciones de la división Street and Racing Technology (SRT) de Chrysler en Detroit, con vistas al año que viene. Sin embargo, ya rezuma una versión GTS destinada a la venta al público, y un GTS-R para competir en el American Le Mans 2012.
Un antiguo icono ha regresado, y según parece, el coche del capó infinito, retorna para seguir dando guerra, al más puro y brutal estilo americano.
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